Como ya hemos mencionado en el anterior artículo (El deporte tras el verano), la época del verano ha terminado y con ella el bueno tiempo, los planes y el exceso de comida y bebida que acompaña a fiestas y a eventos sociales.
Durante esta nueva época, mucha gente intenta retomar su actividad deportiva para mantenerse en buena condición física, sana y saludable. Pero un buen entrenamiento, planificado y con la verificación de un profesional no sirve de nada si va acompañado de una buena alimentación. Pero, ¿cuánta importancia tiene una buena alimentación en la vida de una persona deportista?
La importancia de la alimentación junto al deporte
Una buena alimentación es uno de los factores más importantes para la práctica de cualquier deporte. Otros factores son los genéticos y el tipo de entrenamiento que realiza cada persona. Al alimentarse, una persona deportista busca alimentos que le puedan proporcionar energía, fortaleza y una rápida reparación de los tejidos para no sufrir posibles lesiones. Alguno de los beneficios que aporta una buena alimentación para un deportista está:
- Mejora la velocidad, fuerza y movilidad
- Recuperaciones más rápidas
- Mayor desarrollo de masa muscular
- Mantenimiento de un peso saludable
- Mejora del funcionamiento de corazón, pulmones, músculos y huesos
- Lucha contra la ansiedad y el estrés
- Ayuda a la prevención de enfermedades crónicas
Qué son las dietas deportivas
Las dietas deportivas se encuentran dentro del amplio mundo de la nutrición y alimentación. Su propósito principal es adaptar la nutrición a los entrenamientos, la recuperación del cuerpo y la resistencia.
Todo esto es necesario para poder cumplir con los objetivos físicos sin tener ningún tipo de lesión posterior.
Los 5 alimentos más importantes para cualquier deportista
Verdura y fruta: En cualquier tipo de menú es necesario que el plato contenga la mitad de verdura para obtener todos sus beneficios. Este tipo de alimentos aportan vitaminas, fibra y agua y minerales para nuestra salud. En porciones, se recomienda comer dos porciones de verdura y tres porciones de fruta diaria.
Legumbres y cereales: Como patatas, garbanzos, habas, lentejas, boniatos… Son una fuente importante de energía, algo muy importante para la condición de un deportista. Los profesionales de la salud y la alimentación aconsejan que este tipo de cereales sean integrales para prevenir posibles enfermedades. La porción diaria ideal es de un cuarto del plato durante el almuerzo o la cena.
Carne, pescado y huevos: Otra fuente importante de energía, proteína y hierro. Se recomienda comer una pequeña porción diaria, teniendo en cuenta que este tipo de alimentos deben de ir variando en el plato. Eligiendo tipos diferentes de pescado (azul, blanco…) y de carne (roja, blanca…) para cada día. Si se trata de una persona vegana, deberá hacer más hincapié en las legumbres, cereales y frutos secos.
Frutos secos y semillas: Este grupo ofrece proteínas, vitaminas, fibra y minerales. A la hora de consumirlos, es recomendable que sean naturales y no salados puesto que la sal no aporta valores nutricionales positivos. Estos alimentos son una fuente de energía más concentrada que cualquier otro tipo de alimento.
Productos lácteos: Una fuerte importante de calcio, proteínas, zinc y vitaminas. A la hora de elegir este tipo de productos, se recomienda que sean descremados para así rebajar su nivel graso. Los profesionales recomiendan tres porciones diarias.
Aunque estos grupos son los más beneficiosos para nuestra salud, debemos de tener en cuenta los gustos de cada persona junto posibles enfermedades o alergias. A la hora de hablar del mundo deportivo, también varía el tipo de alimentación para cada deporte, puesto que en las diferentes actividades necesitas un tipo de aporte nutricional u otro.
Ante cualquier tipo de duda, es necesario consultar con profesionales de la salud y la alimentación.